Todos los gases que actúen, formen o sean parte de las capas naturales atmósfera, son denominados gases del efecto invernadero. Luego, se encuentran los que son emitidos por el ser humano, gases antropogénicos, debido a ello, han desequilibrado al clima y al efecto invernadero también.
Los principales gases del efecto invernadero
Clorofluorocarbonos (CFC): Químicos artificiales creado por el hombre, que se hacen presentes en pocas porciones en la atmósfera, pero que su impacto es altamente nocivo para ella. Es utilizado para producir aluminio, aerosoles y los sistemas de refrigeración de nuestros aires acondicionados.
Dióxido de carbono (CO2): Autor principal del efecto invernadero. Su concentración en la atmósfera se debe a las emisiones de gas de los medios de transporte e industrias.
Metano (CH4): En zonas pantanosas, donde se cultiva y cosecha arroz, su alto contenido natural está presente. Cuando una de estas zonas se fermenta, puede producir este gas invernadero y llegar hasta la atmósfera.
Ozono troposférico (O3): Su origen se debe al quemado de fuentes energéticas, como el petróleo.
Óxido nitroso (N2O): Este gas se produce para la agricultura industrializada, porque su componente sirve como fertilizante. Para la atmósfera no es amigable. Puede ser hallado también en los motores de aviones comerciales, en automóviles con modificaciones y en compañías de su elaboración.
Vapor de agua: El agua al entrar en contacto con altas temperaturas, cambia de estado líquido a gaseosos, produciendo uno de los gases de invernadero. Este fenómeno natural ocurre en los océanos muy seguido, debido al cambio climático.